El 1 de septiembre, la Cámara de Diputados en Chile aprobó de manera unánime una importante medida que beneficiará a los adultos mayores de nuestro país. La ley, que ya fue despachada para su implementación, extiende la validez de las cédulas de identidad para ciertos grupos de personas mayores, facilitando su identificación y reduciendo trámites administrativos. Este avance representa una gran mejora en la calidad de vida de los adultos mayores, ya que disminuye la necesidad de desplazarse y realizar trámites frecuentes, especialmente para quienes tienen movilidad limitada.
La iniciativa contempla que quienes tengan 80 años o más podrán mantener su cédula vigente por 20 años, en lugar de 10, contribuyendo a su tranquilidad y seguridad. Además, se incluye a aquellos mayores de 60 años en situación de dependencia severa o postrados, siempre que cuenten con certificación médica, beneficiándose de una mayor comodidad y reconocimiento de sus necesidades específicas.
Esta medida no solo favorece a los adultos mayores, sino que también ayuda a descongestionar los recursos del Registro Civil, permitiendo una atención más eficiente y centrada en quienes más lo necesitan. Sin duda, este paso representa un avance en la protección y dignificación de nuestros adultos mayores, promoviendo una sociedad más inclusiva.